Arquitectura para el cultivo de km0: Invernadero KasvattamoLa proximidad de los bienes de consumo es una necesidad cada vez más acuciante, lo que nos hace plantearnos si soluciones como el invernadero Kasvattamo deberían de cobrar mayor interés en nuestras ciudades
Cada vez son más las voces que nos hablan de los cultivos de kilómetro 0 y los beneficios que esto supondría para la sociedad, tanto a nivel de consumo como a nivel de ecología, sin embargo, ¿cuáles son las respuestas que se pueden plantear a esta cuestión?
Imagen de selgascano
Desde hace varios años hemos podido observar el auge de los huertos urbanos, así como de los proyectos para convertir a las grandes metrópolis en “ciudades verdes”, donde la vegetación y el cultivo nos permitan aminorar el acelerado impacto que tiene sobre nuestras vidas el vivir rodeados de contaminación.
Muestra de esto son los proyectos desarrollados por Vincent Callebaut para que la ciudad de París pase de ser “la ciudad de la luz” a ser “la ciudad verde”.
Imágenes de Vincent Callebaut Architectes
Si bien los proyectos planteados para París son a gran escala, lo cierto es que a día de hoy existen multitud de ejemplos de proyectos de pequeña escalas que nos permiten dar respuestas muy acertadas a todas las cuestiones planteadas en la órbita de las nuevas ciudades verdes.
Un claro ejemplo de esto es el invernadero Kasvattamo, desarrollado como muestra de arquitectura efímera por parte del ROOH Studio.
Imagen de Aki Markkanen
Se trata de una instalación temporal diseñada en el año 2020 para estar ubicada en el patio del Helsinki City Museum, buscando concienciar a la población local acerca de los conceptos del cultivo urbano.
Imágenes de Aki Markkanen y ROOH Studio
Según el equipo de arquitectos “Kasvattamo es un prototipo que puede ser replicado y reutilizado tanta veces como sea deseado para aprovechar espacios en desuso dentro de las ciudades para producir nuestra propia comida”.
Imágenes de Aki Markkanen y ROOH Studio
La estructura modular de los andamios se combina con elementos diseñados de manera sencilla para ser construidos por las manos de los voluntarios durante los talleres celebrados, empleando correas de seguridad para la sujeción de las pérgolas y las mesas. La versatilidad de las diferentes partes del conjunto permite ampliar el espacio frente al mismo durante ciertos eventos, así como lograr más espacio de trabajo durante la celebración de los talleres.
Imágenes de Aki Markkanen y ROOH Studio
Dicha estructura se mantuvo en crecimiento durante todo el verano, permitiendo así desarrollar al completo el cultivo de todo aquello que fue plantado en su interior hasta el momento de la cosecha, tras el cual fue desmontada y reutilizada en la sede central de la ONG Dodo, dejando una huella aún más verde al convertirse en un ejemplo de arquitectura circular.
Imagen de Aki Markkanen
Por último, hay que destacar que el dimensionado de todos y cada uno de los elementos está planteado para cumplir con las excepcionales medidas de distanciamiento social derivadas de la crisis sanitaria que llevamos viviendo desde hace ya más de un año, lo cual permitió su uso para todas y cada una de las actividades planteadas.
Imágenes de Aki Markkanen y ROOH Studio
Escrito por Raúl García Taranco desde TAMPERE
Fotografías de selgascano, Vincent Callebaut, ROOH Studio y Aki Markkanen
