Casa Tacoronte: La casa del Acantilado

Autor

Redacción

Fecha

15/08/14 13:42

Cuando disfrutar del emplazamiento, del entorno, del paisaje son los principales objetivos, que pensando en el cliente, tiene en cuenta el arquitecto cuando proyecta una vivienda, el resultado es espectacular.

“Hay una arquitectura para exhibirse y ser vista y hay otra para mirar y entender…

Subir a lo más alto es llegar a la meta. Por eso la arquitectura que se implanta en la cima se manifiesta siempre con un rasgo de orgullo que se refleja en la voluntad de mostrarse y observar. De este modo explica Andrea Palladio la ubicación de su obra para Paolo Almerico, conocida como la villa Rotonda, a las fueras de Vicenza: “El sitio es de los amenos y deliciosos que se puedan encontrar: porque se halla en un montículo de subida facilísima”. Y añade que ese lugar “está circundado de otras amenísimas colinas que le dan el aspecto de un gran Teatro”. El emplazamiento se convierte así en el escenario donde exponerse, pero a su vez la misma obra es el palco privilegiado para mirar alrededor…”

Juan Calduch, extractos del prólogo de la publicación “Vivienda en Desnivel” de Editorial Pencil donde está publicado este proyecto.

La vivienda unifamiliar en Jardín del Sol, en Tacoronte (Santa Cruz de Tenerife), está ubicada al píe de un acantilado con vistas al océano Atlántico. Es un lugar único, donde se puede disfrutar, en un mismo plano, de una vista de 300 metros de ladera que finaliza en una playa de arena negra, del Teide y de toda la costa Norte de la isla de Tenerife.

“Un módulo paralelepipédico de una sola planta alberga los dormitorios y espacios de servicio y se introduce en el volumen en doble altura del salón-estudio-cocina constituyéndose ambos en una pieza en forma de L que rodea la alberca, negra y situada al borde de la plataforma; de forma que su superficie parece fundirse con la del mar…” párrafo extraído de la propia memoria del proyecto.