© Fernanda Marques y Arquitectos Asociados. Fotografía Fernando Guerra.Con motivo de los Juegos Olímpicos 2016 de Brasil, he preparado una pequeña selección de la obra de algunos de los arquitectos más reconocidos de ese país: Dos mujeres: Fernanda Marques y Carla Juaçaba y dos Hombres: Marcio Kogan y Guilherme Torres.
La primera de ellas es la Arquitecta Fernanda Marques. Nació y se formó en São Paulo en la Universidad de Arquitectura. En los inicios de su carrera profesional trabajo con Jean Carlo Gasperini, uno de los maestros de la arquitectura contemporánea en Brasil. Posteriormente, en 1990 abrió su propia oficina, “Fernanda Marques Arquitectos y Asociados”.
Entre sus obras he escogido La Casa Limantos (2012), por su aspecto entre retro y moderno.
Lo más característico de esta vivienda es el gigantesco espacio a doble altura potenciado por unos extraordinarios ventanales de suelo a techo y una delicada escalera de caracol blanca y de madera con cuya presencia y belleza el salón comedor gana en elegancia. Su enorme estructura está desarrollada en tres niveles y se integra perfectamente en medio de la naturaleza, rodeada por un magnífico jardín.
Los límites entre el exterior y el interior se desvanecen gracias al sofisticado diseño de unas puertas correderas, totalmente retráctiles, que permiten que la luz invada el interior. Un interior caracterizado por el uso de líneas limpias y sencillas, en cuya decoración se han empleado tonos suaves de la gama del beige y unos acabados en madera que trasmiten una sensación de calidez, comodidad, reposo y por qué no, desconexión del mundanal ruido.
La segunda es la Arquitecta Carla Juaçaba. Nació en Río de Janeiro, Brasil, en 1976. Estudió arquitectura en la Universidad Santa Úrsula, en Rio de Janeiro. Como estudiante universitaria trabajó con la arquitecta Gisela Magalhães, de la generación de Niemeyer. En 2013 ganó la primera edición del Premio Internacional ArcVision – Mujer y Arquitectura.
Entre sus obras más significativas, he escogido la Casa Varanda (2007) por su apariencia e implantación en la parcela. Su rasgo más característico es su volumen rectangular de 24 x 6 m, una enorme planta alargada que divide longitudinalmente la parcela con el único fin de preservar todos los árboles centenarios que existían en ella.
Una casa hecha para la nieta del arquitecto Sergio Bernardes y un artista plástico colombiano. Ambos querían que la casa se pareciese a la Casa Lota, de Macedo de Soares, hecha por su abuelo en 1950, quien proyectó una residencia que destacó por su singularidad dentro del panorama arquitectónico brasileño, ya que combinada una estructura de metal, muy ligera, revestida con piedra, vidrio y ladrillo, con una cubierta de paja, una mezcla diferente de materiales inusuales para esa época.
Tomando como referencia este proyecto, la casa Varanda mantiene una configuración similar. Su estructura está realizada con perfiles de acero corten, soldados, levantados del suelo 80 cm. para evitar posibles inundaciones (esa zona geográfica es propensa a ello) y problemas de humedades con el terreno. En el tejado, la paja original es sustituida por tejas de zinc-aluminio sobre un tablero tipo sándwich. Todas las paredes son paralelas, siguiendo la línea marcada por sus fachadas longitudinales, con el fin de potenciar esa mirada a la naturaleza, al exterior.
La sala está en el centro; las habitaciones, en los extremos. Sus fachadas son de vidrio, lo que permite, al igual que la comentada anteriormente que interior y exterior se confundan, formando un todo indivisible. En el centro la casa se abre a una amplia terraza, elemento representativo de las viviendas brasileñas.
© Fernanda Marques y Arquitectos Asociados. Fotografía Fernando Guerra.
© Carla Juaçaba, arquitecta. Fotografía Fran Parente.
La decoración con metal o madera es una tendencia que está cada vez más de moda. Es estupendo porque estos estilos decorativos son demasiado elegantes para introducir en la decoración del hogar. Son muchas las diferentes alternativas que se pueden incluir para decorar, pero nosotros sin duda apostamos por los cuadros decorativos en metal o madera.