INVERLOSA en rehabilitación: Aislamiento térmico y ahorro energético de ChovA

Con el paso de los años, los elementos externos de los edificios son los más perjudicados, como es el caso de las cubiertas, expuestas tanto a agentes climatológicos como al propio uso. Como respuesta a ello, ChovA nos presenta INVERLOSA, su producto embajador en obras de rehabilitación

Cada vez es más habitual que, aprovechando las rehabilitaciones, se lleven a cabo trabajos de aislamiento térmico, hasta el momento inexistente en la mayoría de edificaciones. El aislamiento térmico, además de proteger de los cambios de temperatura, contribuye también al ahorro energético.

INVERLOSA de ChovA es una baldosa aislante que funciona como solución de aislamiento con protección, diseñadas para sistemas de cubiertas planas invertidas, pudiéndose aplicar en cubiertas accesibles con tránsito de peatones (no siendo aplicable, en general, a usos más intensivos como los definidos de espacios públicos y deportivos).

Estas losas están constituidas por una plancha de poliestireno extruido (XPS), desde 40 mm a 80 mm de espesor, unida a una capa superior de mortero de cemento de 35 milímetros, a base de agregados minerales seleccionados y aditivos especiales reforzados con fibras de polipropileno. La INVERLOSA, de color gris, posee un acabado poroso filtrante constituido por áridos seleccionados, grava de 0 a 4 milímetros que funcionan como capa de protección mecánica.

Los cuatro laterales del XPS efectúan un encaje a medio espesor, con 15 mm de superposición, permitiendo eliminar discontinuidades en el conjunto. La capa superior de protección mecánica presenta las aristas biseladas. Además, la propia configuración de la baldosa facilita una rápida evacuación del agua de la superficie de la cubierta después de días de lluvia.

La INVERLOSA se coloca directamente sobre las láminas impermeabilizantes sin ningún tipo de fijación. Las losas de 30 mm de espesor serán colocadas lado a lado, mientras que si el espesor es de 40 cm o mayor, se colocarán en función de su correspondiente sistema de encaje. Es importante saber que no deben ser instaladas en cubiertas con inclinación superior al 2%, salvo que existan petos u otros elementos constructivos de apoyo.

En las salidas de agua, cambios de pendiente o puntos singulares, es posible cortar el hormigón de las losas según la geometría o dimensiones.

Entre sus principales ventajas encontramos: fácil mantenimiento, colocación sin mortero de agarre, mínimas pendientes, mejor evacuación del agua, simplifica la construcción, estabilidad dimensional, elimina puntos críticos, ahorro de material, mejora del ahorro energético en edificios rehabilitados.

Además, apostando por la INVERLOSA, desde ChovA han llevado a cabo la automatización del proceso de producción con sus consecuentes beneficios: Reducción de tiempos de fabricación, mayor eficiencia operativa e información detallada y accesible en cualquier momento.

CHOVA