Museo del océano y el surf, Biarritz, Francia. Steven Holl. Fotografía: Berreteaga.El Museo del océano y el surf de Biarritz, realizado por Steven Holl en colaboración con Solange Fabião, abrió sus puertas al público el 26 de junio de 2011, ofreciendo espacios de exposiciones y exhibiciones donde ahondar en el conocimiento del océano y de los aspectos científicos y educativos del surf y la cultura del mar.
El edificio cuenta con áreas de exhibiciones, un auditorio, un restaurante, una cafetería y unas oficinas, creando un conjunto que armoniza con el entorno, se integra en él, e invita al visitante a acceder al mismo a través de una gran rampa exterior que conduce hacia la gran cubierta que ejerce de plaza pública y mirador.
Fotografía: Alki
El alzado del edificio evoca el perfil de las olas del mar, que se elevan en sus extremos, recordando a las secciones de las pistas de entrenamiento de skate, permitiendo la práctica de este deporte.
Fotografía: Berreteaga.
Esta forma es fiel a la idea inicial del proyecto, la de crear espacios exteriores "bajo el cielo", e interiores "bajo el océano", que se consigue con esa gran cubierta, cóncava desde el espacio abierto superior y convexa desde el espacio de exposiciones inferior.
Sólo invaden la cubierta dos prismas materializados con paneles de vidrio transparente o traslúcido, que contienen el restaurante, que da acceso a una terraza panorámica superior, y un kiosko para los surferos, y que durante la noche se convierten en dos cajas de luz iluminando el espacio exterior.
Fotografía: Longarina.
En el extremo suroeste de la plaza se dispone una pequeña piscina de skate, bajo la cual se encuentra un espacio cubierto que comunica con el auditorio y las salas de exhibición interiores, proporcionando un área donde celebrar espectáculos y eventos al aire libre pero protegidos.
Fotografía: Iwan Baan.
La cubierta se remata con adoquines de piedra con gramínea emergiendo entre las piezas. El resto de la envolvente bajo cubierta repite la misma materialidad de los prismas, combinada con paramentos opacos de hormigón blanco texturizado, que hace resaltar el edificio entre el verde predominante del entorno.
Fotografía: Iwan Baan.
Fotografía: Berreteaga.
Los espacios interiores tienen un acabado neutro, con paramentos enlucidos de color blanco, que facilitan su uso como pantallas de proyección, combinados con suelos técnicos flotantes de madera.
Fotografía: Iwan Baan.
https://www.stevenholl.com/project/cite-de-l-ocean/
