Ibrahim AbdelhalimHoy queremos hablaros de un proyecto emblemático en la historia de la arquitectura. Aunque gran desconocido en el mundo occidental, este proyecto estuvo destinado a convertirse en gran foco de atención y referente entre los países árabes, aunque lamentablemente no llegara nunca a construirse. Se trata del Museo Oasis de la Ciencia, la propuesta del arquitecto Ibrahim Abdelhalim en respuesta a un concurso organizado en Riad, Arabia Saudita, en el año 1989.
El Museo de los Oasis de la Ciencia trata sobre el lugar de la tecnología en la arquitectura tradicional, considerando también el significado de la propia tecnología. Concebido como un dispositivo de seguimiento cosmológico, cuya forma expresara una relación física con los movimientos planetarios, este museo tiene asimismo la intención de actuar como un vívido recordatorio de la contribución musulmana a la ciencia de la astronomía en el pasado.
El 28 de junio de 1982, la Autoridad de Desarrollo de Riad extendió una invitación a un número limitado de estudios de arquitectura para participar en el Concurso Internacional para el Diseño de la Ciencia y el Complejo Espacial en Riad. Entre los invitados estaban los arquitectos Rasem Badran y el Dr. Ibrahim Abdelhalim.
El concurso se organizó en dos fases, de la primera de las cuales debían salir escogidos tres arquitectos. La fase dos tendría como objetivo el desarrollo ulterior de un proyecto más detallado, formalizado en proyecto ejecutivo.
Ambos arquitectos, el Dr. Abdelhalim Ibrahim y Rasem Badran, fueron seleccionados por un comité técnico de alto nivel, encabezado por el Príncipe Sultán Ben Sal-man, para pasar a la segunda fase.
Se pidió a cada arquitecto que presentase una propuesta independiente en respuesta a las observaciones formuladas por el Comité técnico. Más tarde se acordó que las dos oficinas trabajarían en colaboración, pero presentarían dos soluciones diferentes. El resultado de esta fase se presentó a la ADA en junio de 1990.
El Comité determinó la dirección del desarrollo de un proyecto final basado en una de las dos propuestas, aunque incorporando las características más importantes de su rival. Como conclusión de dicho debate, se pidió a ambos equipos que presentaran un programa conjunto que incorporase las recomendaciones del comité al proyecto final. Las imágenes que os mostramos en el presente artículo corresponden precisamente a esa propuesta conjunta que se presentó a principios de julio de 1990.
En cuanto al desenlace de este concurso, lamentablemente no llegó nunca a construirse, aunque desconocemos las razones de ello. Esperemos no obstante que, entre rascacielos y estadios exuberantes, los habitantes de Arabia Saudita se acuerden de sus orígenes y hagan un hueco a esta joya que ya forma parte de la historia de la Arquitectura.
