PH Scalabrini Ortiz, un ejemplo de vivienda mínima en alturaKohan Ratto Arquitectos son los artífices de la rehabilitación y ampliación de una vivienda mínima, una casa de conserje de apenas 30 m2, perteneciente al conjunto de las ‘casas PH’ del barrio de Palermo de Buenos Aires, Argentina, un conjunto habitacional de tipología tradicional de los años 40
La vivienda constituye el último inmueble de esta serie, el más pequeño de todos, situado en la zona central del bloque, de la manzana, caracterizada por la alta densidad y la baja altura de las edificaciones.
La vivienda original había sufrido numerosas transformaciones, entre las que destacaba la pérdida del patio trasero, techado en una de las modificaciones para ganar superficie, conllevando ello la pérdida de luz natural y ventilación de los espacios interiores. La intervención tiene como premisa la recuperación de la huella original del edificio, devolviendo el espacio del patio a la planta, considerándolo así uno de los elementos clave que caracterizan estas casas tradicionales PH.
La vivienda plantea por tanto un programa en altura, con 3 niveles habitables, donde el programa se distribuye con un reparto que organiza los espacios de menor a mayor privacidad a medida que se gana en altura.
De este modo, en la primera planta se sitúa el salón y la cocina, dentro de un espacio diáfano que vuelca al patio trasero, concebido como una extensión exterior del espacio interior gracias a la disposición de un cerramiento de vidrio que permite una conexión visual entre los mismos, garantizando a su vez la iluminación y ventilación natural del área interior.
Además, este cerramiento disfruta de la doble altura creada en el salón gracias a la cesión de este perímetro por parte de la planta segunda, donde se sitúa el estudio.
De esta manera ambos niveles quedan conectados entre sí, a la vez que el estudio disfruta de la luz, ventilación y vistas hacia el patio.
En la última planta se sitúa el dormitorio y el baño.
Nuevamente, el espacio principal se abre al exterior con un gran ventanal que vuelca al patio y que permite disfrutar además de vistas de la ciudad.
Con estos 3 niveles la nueva vivienda alcanza un área de 52 m2, además de otros 26 m2 de espacio exterior, constituidos por el patio y la terraza ajardinada, que permite nuevamente el disfrute al aire libre y el paisaje urbano circundante, a la sombra de la vegetación vecina de gran porte.
Las cuatro plantas quedan conectadas por una escalera abierta, de zancas metálicas y peldaños de madera sin tabica, que aumenta la sensación de amplitud y conexión entre los espacios de los distintos niveles.
El mismo material, el acero, fue escogido para la estructura del volumen añadido, minimizando así la carga aplicada a los muros preexistentes y reduciendo los tiempos de ejecución de la intervención.
Los acabamos interiores están constituidos por superficies blancas que consiguen nuevamente potenciar la sensación de amplitud y la imagen contemporánea de la vivienda, aportando el toque cálido la madera y la abundante vegetación del patio.
Kohan Ratto Arquitectos
Imágenes de Javier Agustín Rojas
