El Gimnasio se ubica en el actual límite Norte de la ciudad de Malpartida de Plasencia, en una situación de media ladera y enclavándose a la mayor cota del municipio, dentro del recinto escolar del Instituto Quercus de Educación Secundaria Obligatoria al que viene a dotar de Gimnasio. Acomete también el proyecto la necesaria urbanización del recinto de juegos y recreo asociado al centro, además de implantar una pista exterior deportiva y un nuevo acceso rodado desde el casco urbano. Así, se urbaniza desde el mismo proyecto tanto el entorno inmediato al Gimnasio como todas las relaciones del mismo con su entorno de relación, determinando en el mismo la propia elección del lugar donde se edifica y sirviendo de articulación para toda la acción domesticadora de la primigenia y difícil topografía de la que se partía para conformar el patio de recreo y la pista exterior deportiva, de 22 x 44 metros. Esta se ubica entre el IESO y el límite norte del solar, en fuerte pendiente ascendente desde el centro escolar.

El proyecto nace del diálogo entre dos formas simultáneas y diferenciadas de responder a los requerimientos que se nos plantean. Dos operaciones  fundamentales, cada una de ellas desarrollada y construida según un sistema que le es propio:

- La domesticación de un terreno de topografía compleja, a media ladera, mediante la disposición de un orden pautado por una secuencia de muros de contención de hormigón que modelan en base al terreno que desplazan, y al cual se  acomodan, hasta alcanzar mediante esta pauta el orden necesario para cada uno de los usos, tanto interiores como exteriores, de los que es dotado el centro mediante esta operación.

- La disposición sobre los mismos de un prisma ciego, blanco, contenedor de un espacio en penumbra sobre un zócalo murario, lleno de luz, y dispuesto bajo el criterio de máxima compacidad y contención  modular y estructural, y que se establece como referencia de las todas las decisiones del proyecto.

Un proyecto que es la suma de, al menos, dos formas de entender. De responder desde su interacción, y de responder desde su propia ley generadora directamente vinculada con su especifica posición topológica. De responder, cada una de ellas, a su particular ubicación y al programa desde un entendimiento constructivo y proyectual propio, que solo en su común diálogo se ofrece como la respuesta única y completa del proyecto.