CELL es un gimnasio de entrenamiento personal que ofrece no solo entrenamiento físico, sino también asesoramiento nutricional, inhalación de gas hidrógeno y equipos de muestreo de sangre. Un proyecto del estudio de arquitectura japonés Arii Irie Architects
El número de gimnasios de fitness está aumentando rápidamente en los últimos años en el país nipón, gracias a un auge en la preocupación por el cuidado del cuerpo, ya sea a nivel de salud como de estética. A diferencia del lugar de entrenamiento informal estándar, el concepto programático de este gimnasio es el de un centro de entrenamiento personal profesional que se acerca al entrenamiento desde el nivel celular, de ahí su nombre CELL Gym.
El proyecto diseñado por el estudio japonés con base en Tokio Arii Irie Architects, no solo ofrece entrenamiento físico sino también asesoría nutricional, inhalación de gas hidrógeno y equipo de toma de muestras de sangre para la monitorización completa de nuestra salud. Debido a lo cual, el equipo de arquitectos, crea un espacio con sentido de seriedad, donde el entrenamiento contribuye sólidamente y va direccionado hacia un único resultado.
Teniendo en cuenta las limitaciones de las construcciones de la capital japonesa, Arii Irie Architects diseñó una cortina de tiras curvas de PVC naranja que funciona como un umbral entre la vida cotidiana y el entrenamiento. El color vivo de las tiras enfatiza el contraste entre los dos mundos, mientras que la translucidez del propio material, así como la acción de atravesar la cortina entre el espacio de asesoramiento y el de entrenamiento, inspira la conciencia de la transición. Entrar y salir desde cualquier lugar da a los dos espacios una sensación de unidad.
El área de entrenamiento se concibe como un espacio desnudo, con instalaciones vistas y materiales crudos, como es el caso del hormigón visto, con su acabado completamente despojado de cualquier ornamento y textura añadida. Es un espacio donde uno puede enfrentarse al propio cuerpo en una atmósfera despojada de todo artificio y concentrarse en el entrenamiento.
En cambio, en el espacio de asesoramiento vemos como, a pesar de mantener una estética donde la estructura desnuda es la protagonista: mobiliario de lineas suaves, madera, tejidos naturales, plantas decorativas y textiles en sus ventanas, obra del diseñador Yuki Tsutsumi, ofrecen una reconfortante calidez a los usuarios de este exclusivo gimnasio donde la personalización de sus servicios es su principal objetivo, dando lugar al mismo tiempo, al espacio de contrapunto del proyecto CELL Gym.
Fotografía de Toshiyuki Udagawa