En el nombre del amor (y la arquitectura)Proyectos formulados en el nombre del amor y la arquitectura para celebrar la remembranza, la fraglidad humana, y el romance
¿Qué harías por amor? El emperador musulmán Shah Jahan tomó muchas esposas, pero ninguna fue tan adorada como Mumtāz Mahal, “adorno amado del palacio”. Cuando murió en 1631, Jahan reclutó a una junta de arquitectos para diseñar el Taj Mahal en su honor. Si bien el amor no siempre se puede perpetrar con un palacio, festividades como el día de los enamorados, también conocido como San Valentín, permite celebrar y reconocer el sentimiento de amor, inspiración de muchas disciplinas entre ella la arquitectura, entendida en el mundo moderno como neta racionalidad y progreso.
Este monumento funerario, considerado el más bello ejemplo de arquitectura mogola, no es su geometría y los elementos que conforma su composición, el Taj Mahal es la historia de amor entre dos personas. Es así por lo que no fueron gratuitas las especulaciones del fracasado matrimonio del príncipe Carlos y Diana de Gales, cuando ella fue fotografiada sola frente del majestuoso palacio en una visita real.
Princesa frente al Taj Mahal en India. Fotografía por Martin Keene
Teóricos como el arquitecto Alberto Pérez-Gómez, realiza una crítica al pensamiento moderno en arquitectura. Propone recuperar la comprensión de la arquitectura como una práctica poética, cuyo foco es el amor. Y ¿qué es el amor?
El amor es Eros. En la mitología griega este dios es responsable de la atracción sexual y el amor venerado; en la mitología romana es conocido como Cupido. Sin embargo, las ideas del Eros de Platón delinean un eros universal, una “escalera amorosa" - el amor a los bellos cuerpos; luego, a las bellas costumbres; posteriormente, a las bellas ciencias y, por último, a la Belleza- por lo que este amor puede estar focalizado de diversas formas.
Estatua en broze de Eros. Período helenístico. Museo Metropolitano de Nueva York
El amor a la belleza sería la única verdad y el sentido de la vida (y de la arquitectura). En palabras de Pérez-Gómez: Una visión de la arquitectura que trasciende las preocupaciones de forma y función, y encuentra las conexiones entre el deseo del arquitecto de diseñar un mundo hermoso e imperativo de proporcionar un lugar mejor para la sociedad. Por lo que la arquitectura es el escenario de nuestro peregrinaje pasando por lugares y sitios hermosos que, a través de sus ambientes y experiencias dan sentido a la vida. La casa donde crecimos, el restaurante de tu primera cita, la ciudad donde anhelamos vivir, la casita donde queremos envejecer. Es así como el amor es nostalgia y memoria también.
Tal como el Taj Mahal, el Templo Kodai-Ji en Japón, ordenado por la aristócrata Kita-no-Mandokoro en memoria de su esposo, el samurái Toyotomi Hideyoshi, reconoce la arquitectura como una práctica conmemorativa, de fragilidad y entrega. Luego de la muerte de su esposo, Mandokoro se convirtió en monja budista, y la construcción del templo en su memoria es uno de los templos budistas zen más grandes en Japón.
Templo Kodai-Ji construido en 1606
El amor también es para todos. Habitat Workshop con su proyecto Bloom, ganador del 14º Concurso Anual de Amor y Diseño de Times Square, realiza una estructura en forma de corazón que, en palabras del estudio: “Es una ofrenda de esperanza y un recordatorio de que debemos encontrar vivacidad en medio de la oscuridad, después de estos años de pandemia”. Durante trece años, Times Square Arts ha acogido el Times Square Love and Design Competition para aplaudir el trabajo de las firmas de arquitectura y diseño y abordar temas de amor durante el mes de febrero en Times Square. Estas instalaciones arquitectónicas permiten que los 350.000 peatones diarios que mueve esta plaza, abracen diversas expresiones de amor, tanto individuales como colectivas.
Bloom estará a la vista en Duffy Square del 9 de febrero al 9 de marzo
Heart Squared por MODU y Eric Forman Studio’s. Ganadores del Concurso Anual de Amor y Diseño de Times Square en 2020
"A pesar de nuestras sospechas, la arquitectura ha sido y debe continuar estar edificados sobre el amor" dice Pérez-Gómez. La arquitectura construida sin amor está condenada al formalismo vacío, al funcionalismo, a la moda y el consumismo. El amor le da a la arquitectura la base para comprender la realidad incierta y en movimiento, conecta la idea y su encarnación, el conocimiento y la ignorancia en una forma poética.
La arquitectura como el amor, no se encuentra, no se busca, se construye. ¡Feliz día de San Valentín!
Escrito por Paula Cano desde ESTADOS UNIDOS
Fotografías de MET, Templo Kodaiji, Times Square Arts
