Tras un terremoto sufrido en 2012 y fruto de los trabajos de reconstrucción de la pequeña localidad de Shuanghe, situada en la provincia china de Yunnan, surge “The Pinch”, una biblioteca y centro comunitario cuyo principal elemento constructivo es la madera.
Tras el terrible seísmo que destruyó casi la totalidad de este pequeño pueblo de montaña el gobierno chino dirigió el proyecto de reconstrucción del mismo.
Dentro de este proyecto se enmarca, gracias al patrocinio de la Universidad de Hong Kong, la construcción de un nuevo edificio que funciona como biblioteca y sirve para activar a la comunidad y dotar al espacio de un monumento.
La obra, de 2014, que desarrolló el equipo de arquitectos formado por John Lin y Olivier Ottevaere , cuenta con tan solo 80 metros cuadrados.
La nueva biblioteca se apoya en un muro de contención de 4 metros de altura, actuando como enlace entre la zona reconstruida y la nueva plaza. De este modo, además de aprovechar el espacio interior de la construcción, la cubierta de doble curvatura funciona, gracias a su ubicación, como mirador desde el que se pueden disfrutar del entorno natural que lo envuelve.
La cubierta de la biblioteca, totalmente transitable, ha sido realizada con madera procedente de una fábrica local. Una serie de cerchas de madera ancladas entre el nivel de la calle superior y el nivel de la plaza inferior resuelven la estructura y sustentación de la misma. Completa esta cubierta una capa de impermeabilización de aluminio.
Además del laminado que conforma el tejado y su propia estructura, la madera es también el elemento protagonista del diseño interior de la biblioteca.
Del entramado que forma la cubierta nacen unas vigas que se extienden hacia abajo configurando unos estantes flotantes con marcos de madera, dejando así un espacio vacío en el suelo y elevando los libros, aspecto que facilita su accesibilidad. Completan el espacio simples bancos escolares a modo de sillas.
Con el objetivo de unificar espacios y ampliar los posibles usos del edificio, la fachada principal se configura como una serie de puertas y ventanas de policarbonato que generan un espacio abierto a la plaza.
© Fotos John y Olivier Ottevaere