Tras de años de instalar edificios temporales junto a la principal edificación del centro educativo, se propuso diseñar un edificio completamente nuevo que fuera adecuado para el colegio.
Los encargados de este proyecto fueron el estudio barcelonés B720 Fermín Vázquez Arquitectos, un equipo de arquitectos que lleva adelante un proyecto que establece una relación visual y funcional, entre un antiguo e histórico edificio y una estructura contemporánea, a través de un porche que permite la comunicación interior entre ellos y un espacio cubierto bajo el cual refugiarse en caso de lluvia.
El nuevo edificio se desarrolla en cuatro niveles: un nivel semisótano que aprovecha las irregularidades entre el jardín y la calle creando un acceso directo parcialmente cubierto y un área de espera exterior para padres e hijos, un espacio desde el cual se puede acceder al interior del nuevo edificio y al jardín por las escaleras o la rampa.
En cambio, en los tres niveles superiores, se ubican las aulas. La propuesta ubica todas las aulas en el nuevo edificio, dejando usos comunes preservados y restaurados en el antiguo edificio: biblioteca de medios, sala de música y áreas de administración. Aun así, el proyecto en conjunto mantiene el esquema de un gran patio central para juegos y espacios perimetrales funcionales.
El diseño de la fachada se establece mediante un revestimiento de listones verticales que recorre todo el perímetro de la edificación. La posición, orientación y separación de estos listones se han estudiado para proporcionar una protección solar óptima y ser altamente eficientes en su comportamiento ambiental, térmico y de durabilidad de la edificación. Un diseño que permite una mejora notable en las instalaciones educativas y contrasta con el edificio histórico que no complementa.
© B720 Fermín Vázquez Arquitectos
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