La extensión del arquitecto británico Premio Pritzker completa el complejo de cuatro edificios de diferentes épocas, marcando así la entrada a la zona educativa de la universidad y las artes
La propuesta ganadora de Chipperfield, inaugurada en 2021, hace una importante contribución cultural al posicionamiento de Zúrich dentro de las metrópolis. El Kunsthaus, en alemán, "museo de arte", fue construido en 1910 en Heimplatz por Karl Moser, para después ser ampliado por los hermanos Pfister y Erwin Müller, todos arquitectos locales. Este nuevo proyecto de ampliación duplica el espacio de la colección expuesta, haciendo posible mostrar más pinturas y esculturas de su valiosa colección, además de crear un espacio para exposiciones temporales. Hasta ahora, solo se podía mostrar alrededor del diez por ciento de las obras. Gracias al nuevo proyecto, el arte de la década de 1960 en adelante se mostrará aquí en particular.
Fachada de piedra en contraste con el edificio existente y vista desde el jardín
Con su forma purista y elegante, el compacto volumen cuadrado tiene una fuerte presencia en el espacio urbano. La estrategia estaba clara: un volumen geométrico claro delimitaría la plaza, y a su vez, serviría de membrana entre el espacio urbano donde se encuentran el resto de museos y el jardín natural posterior, una zona de esparcimiento y eventos que resuelve el desnivel hacia el barrio universitario. A pesar de su gran volumen, se integra con sensibilidad en la plaza de los museos a través de la materialidad utilizando la piedra, material de fachada del museo original y de gran parte de los edificios públicos representativos de la ciudad, pero con una técnica contemporánea. Esta combinación de tradición e innovación se materializa en unas esbeltas piezas de piedra caliza local combinadas de forma irregular para dar textura y movimiento a la fachada. Dicha superficie estriada se abre en puntos estratégicos para conseguir luz natural en las salas que lo precisan.
Sección longitudinal continua desde el museo original hasta el jardín posterior a través del vestíbulo
Vista del foyer desde la escalinata
La estrategia ganadora del proyecto es sin duda es la creación del vestíbulo principal. Este imponente espacio sobredimensionado recorre el edificio completamente en longitudinal, unificando la plaza de los museos con el nivel del jardín a través de una escalinata monumental. El foyer no solo facilita la circulación principal, sino que este patio abierto en su altura completa conecta e ilumina todas sus plantas entre sí, las cuales a su vez enlazan los espacios expositivos a través de plataformas transversales que cruzan el mismo. Además de la conexión desde el exterior, los dos edificios del museo de arte están conectados entre sí por un pasaje subterráneo interior, lo cual facilita la experiencia continua sin verse interrumpida por el tráfico.
Sala de exposiciones con la línea del horizonte estructural destacada a través de la materialidad
El manejo de la luz natural es un tema importante para el uso del edificio, pero también debido a la voluntad de reducción del consumo de energía para la iluminación. Esta se consigue a través de aperturas discretas en la fachada y de forma cenital. La materialidad interior está marcada por la sobriedad, dando el toque creativo con el uso de materiales y acabados de gran calidad. Por un lado, la estructura vista de hormigón armado que corona los espacios se percibe más doméstica en combinación con el suelo de madera de roble en rieles de gran formato y los tonos azulados desaturados de las salas de exposiciones, que combinan con el mármol gris azulado de los espacios de circulación. El material con el que más han jugado los arquitectos es el latón en tono dorado, el cual aparece en todos los detalles añadidos como en los dinteles de puertas, señalización, barandillas y como revestimiento en forma de cortinas tubulares.
El uso del latón dorado en los elementos añadidos
A pesar de la criticada implantación en el lugar debido a su carácter autónomo y la proporción de su volumetría o la elección del sistema de fachada, no se puede negar que se ha conseguido un edificio icónico elegante y monumental.
Escrito por Maria Unceta desde Zúrich
Fotografías de David Chipperfield y Archibatch