Imagine Montessori, arquitectura escolar bioclimáticaUna escuela completamente eficiente, sostenible y con un impacto medioambiental prácticamente nulo, es lo que han conseguido Gradolí & Sanz arquitectes, un estudio cuyo enfoque característico es la arquitectura bioclimática
Imagine Montessori School ha inaugurado un centro educativo situado en la zona residencial de Valterna, dentro del futuro Ecobarrio La Pinada. Se trata de una escuela, que ha utilizado materiales sostenibles y renovables, cubierta verde y aspectos bioclimáticos en todo su diseño y construcción, por lo que se convierte en el primer colegio de España que obtendrá una doble certificación en sostenibilidad BREEAM Excelente y VERDE 4 hojas.
Vista exterior del edificio en construcción
La madera y el barro cocido protagonizan la construcción del colegio, destacando, por tanto, materiales respetuosos con el medioambiente, que, además, contribuyen a la creación de un edificio sostenible, así como, a la reducción de la huella de carbono y el consumo de recursos. El barro cocido, se utiliza principalmente en los muros de carga, en las bóvedas de ladrillo macizo y en el pavimento. Por otro lado, la madera se utiliza también en la estructura, en los cerramientos y en la carpintería.
Vista exterior de la fachada
Vista interior de la bóveda y cubierta
Se prescinde completamente de los falsos techos, revestimientos y falsos suelos, por lo que todo se encuentra a la vista del niño, siendo, por tanto, su primer material didáctico. De este modo, se entiende cómo funciona, cómo se soporta y cómo se construye una escuela completamente respetuosa con el medioambiente.
Vista interior del aula en proceso
Las aulas, situadas prácticamente a sur, cuentan con calculadas protecciones solares horizontales, lo que permite una adecuada captación solar en invierno y una reducción de radiación solar en las épocas más calurosas del año, evitando de este modo, el sobrecalentamiento en el interior.
Vista interior final del aula tipo
Para una óptima ventilación e iluminación natural, se han diseñado unos espacios verticales de triple altura, llamados captadores solares, que se sitúan en posición central y que aportan un espacio adicional y una conexión visual transversal entre aulas, favoreciendo de esta manera, una ventilación extra que fomenta el “efecto Venturi”, por lo que cuando se requiera, se producirán ligeras corrientes de aire que refrescarán el interior de las aulas.
Planta tipo y relación con el entorno
Una cubierta verde cubre, aísla, da inercia térmica y protege todo el edificio del sol y la lluvia. La construcción pasa desapercibida por un manto verde que se visualiza desde la lejanía. El diseño general del edificio permite un ahorro energético del 70% frente a un edificio convencional de uso similar, por lo que se presenta una escuela completamente eficiente y saludable.
Fotografías de Mariela Apollonio
