La Central Térmica de Ciudad Universitaria declarada BIC por la Comunidad de Madrid

Formando parte fundamental del esquema original de la Ciudad Universitaria de Madrid, la Central Térmica fue diseñada para dotar a todos y cada uno de los edificios del conjunto de agua caliente y calefacción, centralizando en ella todos los sistemas de producción del complejo universitario de Madrid

Central Térmica de la Ciudad Universitaria en la actualidad (© Fundación Docomomo Ibérico / Luis Argüelles)

Ubicada en las inmediaciones del Real Jardín Botánico de Alfonso XIII y del edificio de la universidad de Ingeniería de Montes, la Central Térmica de Ciudad Universitaria fue diseñada por el arquitecto Manuel Sánchez Arcas y el ingeniero Eduardo Torroja, finalizando su construcción en el año 1932. Su estilo racionalista seguía las pautas de las construcciones de la época y no tardaría en recibir el reconocimiento público al ser nombrada como Premio Nacional de Arquitectura en el mismo año de finalización de su construcción.

Sin embargo, antes de continuar comentando las curiosidades de este edificio finalmente reconocido por la Comunidad de Madrid, debemos hacer un alto y tener en cuenta el contexto y el origen de la Ciudad Universitaria, así como el planteamiento y diseño de la misma.

Plano de la Ciudad Universitaria en 1943 e imagen del estado original de la misma (© Fundación Arquitectura)

El complejo de la Ciudad Universitaria de Madrid nace de la mano de Modesto López Otero en el año 1928, siguiendo para su diseño el planteamiento de los campus universitarios estadounidenses. En su totalidad, el conjunto se compone no solo de edificios educativos de las diferentes universidades, sino también de espacios verdes y ajardinados para el disfrute de los estudiantes, zonas residenciales formadas por Colegios Mayores, espacios deportivos como la zona de Cantarranas y el Paraninfo y, por supuesto, espacios de servicio para todos estos edificios.

Si bien es cierto que el complejo de la Ciudad Universitaria como tal fue reconocido como Bien de Interés Cultural en el año 1999 por parte de la Comunidad de Madrid, no todos los edificios que componen este conjunto tienen tal denominación, tal y como ocurría hasta ahora con el edificio que nos atañe, la Central Térmica de la Ciudad Universitaria.

Plano de la Red de Calor de Ciudad Universitaria y galerías para las conducciones térmicas (© TFG Miguel Cantoral)

Desechada la posibilidad del uso de calefacción eléctrica y el vapor en los edificios universitarios, se propone el uso de un sistema de agua caliente producida por generadores que circulaban mediante circuitos cerrados impulsados por bombas.

El diseño de la planta que formaría el edificio de esta central térmica se plantea mediante un esquema en “L” en el que se albergan espacios para la producción del calor, oficinas, taller, garaje, almacén y vivienda para el encargado de mantenimiento. En ese primer espacio donde tiene lugar la producción del calor, se ubicaban originalmente dos calderas “velox” y una de carbón tipo “borsig”, actualmente reemplazadas por equipos de producción más modernos.

Planos e imagen exterior originales de la Central Térmica de Ciudad Universitaria (© Fundación Arquitectura)

Sus rotundos volúmenes y el sencillo tratamiento de los muros de ladrillo visto exteriores, únicamente decorados con ventanas en bandas horizontales, le imprimen el carácter funcional propio de un edificio de servicios sin despojar al mismo de una especial poética.

Exterior y espacios interiores en la actualidad de la Central Térmica de Ciudad Universitaria (© Fundación Docomomo Ibérico / Luis Argüelles)

Teniendo en cuenta su año de construcción (1932), y a la vista de la importancia que tuvo la Ciudad Universitaria durante la Guerra Civil, no es necesario indicar que el edificio fue completamente destruido durante los años que tuvo lugar esta trágica parte de la historia española. Debido a ello, fue necesario llevar a cabo su reconstrucción en el año 1943, siendo el artífice de la misma uno de los diseñadores originales, Eduardo Torroja.

Sin embargo, esta no sería la última de las intervenciones llevadas a cabo en el edificio, pues las transformaciones sufridas en los años setenta darían un cambio sustancial a la volumetría original del edificio, dotando en la actualidad al mismo de una forma de “T” que busca seguir la estética y composición originales.

Planta actual e imagen exterior de la Central Térmica de Ciudad Universitaria (© Fundación Docomomo Ibérico / Luis Argüelles)

El pasado mes de junio de 2023 tuvo lugar la incoación del expediente para declarar BIC la Central Térmica de la Ciudad Universitaria por parte de la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid.  Los motivos alegados para ello indicados en la resolución señalan que es considerada el ejemplo más significativo de la arquitectura racionalista y de vanguardia de los construidos en la zona antes de la guerra y ejemplo pionero del uso de sistema de calefacción central.

Finalmente, el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid terminó por declarar como Bien de Interés Cultural el edificio la semana pasada, quedando publicado tal hecho en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid.

Manuel Sánchez Arcas y Eduardo Torroja

Fotografías de Fundación Arquitectura COAM, Fundación docomomo ibérico (Luis Arguelles) y Urbipedia
Planos de Manuel Sánchez Arcas y Eduardo Torroja