Mantener el carácter rural y adaptación de la estructura a una nueva tipología.
Foto:Fernando Guerra. Vista de la parcela
En la isla atlántica de São Miguel, en las Azores, un antiguo establo de principios del siglo XX se ha convertido en hotel (casas de huéspedes), donde la historia y la contemporaneidad coexisten en equilibrio.
Situación
Foto:Fernando Guerra. Alzado Norte
Giacomo Mezzadri y Joana Oliveira del estudio italiano Mezzo Atelier transformaron estos antiguos establos conviniendo las edificaciones en un hotel con una vibrante fachada de color rosa.
Alzado Norte
Alzado Sur
Su intervención, realizando aperturas en los muros, pintar las fachadas en rosa, para fundirse con los otros edificios tradicionales de la zona.
Alzado Este
Alzado Oeste
El objetivo principal del diseño era mantener el carácter, las líneas y la atmósfera rural de la construcción, al mismo tiempo que se adaptaba la estructura a una tipología completamente nueva y adaptada a las normas.
Sección A-A'
Sección B-B'
Se realizaron nuevas aberturas en fachadas y en la pared de piedra, donde se agregó un nuevo volumen a la construcción principal, lo que permite que una segunda casa más pequeña parezca integrada en el conjunto.
Planta Baja
Planta Primera
Los dos hoteles están diseñados cómo espacios complementarios conectados. La primera planta se caracteriza por diferentes aberturas al exterior, y alcanza diferentes alturas. En el nivel medio, encontramos por su parte las suits privadas y un área de servicio que ofrece un espacio más íntimo.
Foto:Fernando Guerra.
El piso superior contiene los espacios sociales y fue diseñado como una planta libre para que se pueda aprovechar la estructura del techo y su altura total.
Foto:Fernando Guerra.
Desde la cocina hay acceso a una terraza situada en la parte superior de la casa más pequeña de la planta baja.
Foto:Fernando Guerra. Imagen escalera exterior
Foto:Fernando Guerra. Imagen escalera interior
Los elementos nuevos, como las escaleras exteriores, que conectan la terraza exterior o el uso de madera blanqueada en el interior, son reinterpretaciones de la arquitectura vernácula de las Azores.
Foto:Fernando Guerra.
Foto:Fernando Guerra. Fachada Sur
Los tonos rosas y ocres envejecidos son la identidad principal del área donde se encuentra. El ocre se usaba tradicionalmente para enmarcar ventanas y puertas.
Interior estancias
Foto:Fernando Guerra
Los interiores y los muebles hechos a medida con las maderas antiguas de pino y acacia encontradas en el lugar, creando un ambiente neutral que afianza la visión del exterior desde el interior de estas.
En el proyecto de rehabilitacón se utilizó la madera de cryptomeria local (cedro japonés) tanto para la construcción como para el mobiliario especialmente diseñado para el proyecto de reconstrucción realizado en 2017.
Fotografías : © de Fernando Guerra y Rui Soares