La Catedral de Sal de Zipaquirá es un hito de la arquitectura estereotómica y es un homenaje a la geología, a los recursos naturales, y a la ingeniería. Cada espacio dentro de la catedral genera una experiencia única por su composición, iluminación y decoración. El juego proyectual de llenos y vacíos permite experiencias únicas y espacios extraordinarios
En la ciudad de Zipaquirá del departamento de Cundinamarca, se encuentra el más grande hito de arquitectura estereotómica del país, La Catedral de Sal, proyecto único de carácter religioso, cultural y turístico que ha llamado la atención mundial.
Fotografía de Atrápalo
La catedral fue diseñada por el arquitecto Roswell Garavito Pearl como un homenaje a Nuestra Señora del Rosario - Patrona de los Mineros- y se construye bajo la dirección técnica del ingeniero Jorge Enrique Castelblanco entre los años 1992 y 1995 al interior de las minas de sal, ubicadas en el parque de la sal -de 32 metros cuadrados de área- a 48 kilómetros de Bogotá D.C.
Fotografía de Vagabundler
A 180 metros bajo tierra se crea un proyecto arquitectónico tallado completamente en sal, en el cual la técnica es completamente estereotómica; en una gran masa se empiezan a generar oquedades con sentido, el juego de llenos y vacíos permite experiencias únicas y espacios extraordinarios. La catedral se convierte en un tributo a la geología, a los recursos naturales, y a la ingeniería.
Fotografía de Vagabundler
En el primer tramo del recorrido -con 386 metros de longitud y 13 metros de altura- se encuentran las 14 Estaciones del Viacrucis, las cuales, en su mayoría, se proyectan en ambientes imponentes, largos tallados en roca de sal, iluminados con diferentes e intensos colores, donde las esculturas de mármol y sal culminan la composición.
Fotografía de Vagabundler
Al pasar el túnel en donde se encuentra el Viacrucis se llega a la Cúpula -la cual a través de su forma e iluminación azul simboliza el Cielo-, área que permite la visual de la Gran Cámara Central de la catedral, compuesta por cuatro columnas cilíndricas -representando a los evangelistas- donde se encuentra la Cruz tallada más grande del mundo -con 16 metros de longitud-, el Altar Mayor, la cascada de sal, el comulgatorio, y la obra de mármol “la creación de Adán”. El coro se encuentra en la parte superior de la Nave Central generando un gran balcón hacia ésta; es un espacio que alberga una escalinata tallada en sal, representando la escala musical.
Fotografía de Vagabundler
Dentro de la catedral también se encuentran espacios como una cafetería, un auditorio, un gran espejo de agua subterránea -de 80 metros cuadrados-, el Nártex - obra compuesta por una serie de paralepípedos tallados en sal que muestra la formación salina en sus muros-, la ruta del minero, y la cámara de luz y sonido.
Fotografía de Awali
La Catedral de Sal es el encuentro de sensaciones, vivencias, y ramas académicas que convergen en el desarrollo de la más grande maravilla colombiana, permitiendo al usuario el disfrute de un lugar inefable y completamente enriquecedor.
Fotografía de Vagabundler
Escrito por María Carla Flórez Jiménez desde BOGOTÁ D.C.
Fotografías de Atrápalo, Awali, Vagabundler,