La firma de arquitectura milanesa Studio Wok transforma un granero abandonado a las afueras de Verona, construido a base de guijarros de río recubiertos de yeso en una nueva casa de campo.
Limpiar el yeso en exceso de las paredes para revelar la piedra natural fue uno de los primeros pasos de este magnífico proyecto, junto con la limpieza de gran parte de la estructura que interfería en las nuevas funciones de la edificación.
Como resultado de la rehabilitación, nos encontramos con una casa a tres niveles. La planta baja hace referencia a la solidez del granero original, manteniendo materiales originales y añadiendo detalles inspirados en su historia como el nuevo pavimento de piedra de Vincenza y la chimenea de ladrillo.
En contraste encontramos las plantas superiores que se diseñaron como un volumen de madera aparentemente suspendida del techo, una nueva estructura que contiene los dormitorios que constan de iluminación natural gracias a nuevos tragaluces insertados en el tejado. El acabado en abedul pálido de este volumen superior consigue que las intervenciones modernas queden claras en contraste con la piedra original.
Destacando su fachada, el gran arco en la parte delantera de la casa fue reabierto y ahora destaca enmarcado por la entrada a la vivienda, creando de esta manera un proyecto basado en un diálogo espacial y material entre la historia y la modernidad, donde la estructura original sirve de apoyo y sustento a la nueva y ligera estructura que distribuye los espacios de vida.
Las ventanas que fueron añadidas, fueron rodeadas por piedras de biancone que brindan un marco suave en contraste con la rugosidad de las paredes de guijarros. En cambio, la parte trasera se abre a un espacio de patio con una fachada de vidrio donde la madera de alerce es la protagonista.
En paralelo al proyecto de la nueva vivienda, un proyecto de paisajismo remodeló los espacios de jardín que rodean la casa. Al frente, un árbol de magnolia grande y existente, retenido a petición del cliente, proporciona un elemento focal y protagoniza el ambiente exterior de la vivienda rodeado por un lecho de flores. Junto a él se encuentra una nueva piscina, rodeada de piedra y asientos al aire libre que siguen la línea de acabados de los materiales elegidos para la remodelación del proyecto de la casa consiguiendo de esta manera la unión de los diferentes elementos.
Fotografía, Simone Bossi.