Casanguilla de Quarzo Studio destaca por su diseño minimalista y su profunda conexión con el paisaje mediterráneo, el patrimonio y la tradición arquitectónica de la Apulia y apuesta por la sostenibilidad
Ubicada en la campiña salentina de la Apulia se alza Casanguilla, obra de los arquitectos de Quarzo Studio, un edificio que ejemplifica cómo la arquitectura contemporánea puede dialogar con el contexto mediterráneo y su patrimonio constructivo. Esta vivienda unifamiliar, diseñada con la idea de fomentar una profunda conexión con la naturaleza, ha sido concebida para integrarse con el paisaje, respetando la topografía y los materiales propios de la región.
El complejo de pequeñas construcciones que conforman Casanguilla, hunde sus raíces en las tradiciones del sur de Italia que han definido la construcción en esta zona durante siglos.
Destaca el uso de la piedra de toba local, un material ampliamente empleado en la región debido a su disponibilidad y excelentes propiedades térmicas y que se convierte en uno de los elementos distintivos de la construcción. Otro elemento característico que define la imagen exterior del edificio es su revestimiento blanco realizado con una mezcla de cal y agua. La acción de “enjalbergar” se utiliza largamente en la arquitectura mediterránea vernácula desde la antigüedad para proteger las superficies del sol y por su función antiséptica.
La casa se organiza alrededor de tres volúmenes principales: el cuerpo central de la vivienda, un anexo moderno y una lamia histórica con bóveda de cañón, cada uno con entradas independientes. El cuerpo principal alberga los espacios sociales como el salón y el comedor, mientras que la zona de noche se desarrolla hacia el jardín trasero, garantizando privacidad y tranquilidad para las habitaciones.
Uno de los elementos que forman el conjunto es una lamia restaurada. Esta construcción rural histórica, típicamente apuliana, se erigía con la técnica del muro seco que ayuda a mantener la temperatura interior confortable incluso durante los calurosos veranos mediterráneos.
La lamia es un edificio similar al clásico trullo de la Apulia, y en este proyecto ha sido rehabilitada cuidadosamente para preservar su carácter original.
Se trata de una construcción caracterizada por su base rectangular y el techo de losas de piedra o tejas de terracota. Estos edificios servían como refugio temporal o de almacenamiento de los agricultores. Es por ello que, en el interior, normalmente se encuentran chimeneas, estanterías o cisternas. Una peculiaridad de la lamia, que la diferencia del trullo, es la terraza sostenida por una bóveda de cañón utilizada para secar productos agrícolas. Otra característica de estas obras es la inserción de una escalera exterior de mampostería que conduce hacia el tejado.
El interior del proyecto se caracteriza por sus líneas claras y la simplicidad formal que reflejan la esencia del minimalismo mediterráneo, centrándose en los materiales y en la relación del edificio con el entorno. Los materiales seleccionados para la construcción y el mobiliario: piedra, madera, tejidos naturales de lino y algodón, ofrecen una conexión táctil y visual con el entorno, haciendo que la vivienda se sienta profundamente enraizada en su contexto.
La relación entre los espacios interiores y exteriores es una constante en el diseño de Casanguilla. Los pequeños patios y los amplios ventanales enmarcan el paisaje, permiten que la luz natural inunde los ambientes y crean interesantes secuencias de espacios concibiendo un diálogo fluido entre el interior y el entorno circundante. Las áreas exteriores, como la cocina de hormigón y la mesa de mármol, están diseñadas para fomentar la vida al aire libre.
La piscina de 40 metros cuadrados es otro elemento clave del diseño exterior. Minimalista en su concepción, se abre hacia un extenso olivar y se integra sutilmente en el entorno sin dominarlo, ofreciendo un espacio para la relajación que se funde con el paisaje.
Otro de los aspectos destacables de Casanguilla es su enfoque en la sostenibilidad. La casa opera completamente con energía solar, utilizando paneles fotovoltaicos instalados en las cubiertas de los volúmenes principales. Esta solución no solo responde a la creciente necesidad de reducir el impacto ambiental, sino que también se integra perfectamente en el contexto rural, minimizando la intervención sobre el paisaje.
En definitiva, Casanguilla es un ejemplo notable de cómo la arquitectura contemporánea puede inspirarse en el pasado sin caer en la nostalgia, utilizando la tradición como base para innovar y crear espacios que resuenan con las personas que los habitan. Es un proyecto que celebra el entorno natural, el patrimonio local y el diseño sostenible, ofreciendo una nueva forma de vivir el paisaje mediterráneo de la Apulia.
Quarzo Studio
Escrito por Aina Pérez i Verge desde Turín
Fotografías de Luca Abbadati