Fluidez, elegancia y funcionalidad: Isabela Pagnan Atelier de APB Oficina de ProjetosEl estudio de arquitectura de Ana Paula Brunetto, se encarga del diseño del nuevo taller de moda Isabela Pagnan Atelier. Un espacio donde la armonía de la forma orgánica minimalista y una perfecta paleta de colores y materiales, consiguen crear un espacio fluido, creativo y romántico
El proyecto de interiorismo Isabela Pagnan Atelier, obra de la firma de arquitectura y diseño APB Oficina de Projetos, se encuentra ubicado en la ciudad de Londrina, Brasil, en una zona de intensa actividad comercial.
El espacio es una celebración de la fusión entre movimiento, ligereza y funcionalidad. Un diseño basado en líneas orgánicas y tonos neutros componen el espacio, transmitiendo elegancia y sencillez, de la misma manera que su línea de moda.
El atelier goza de una superficie total de 38 metros cuadrados, un entorno versátil que alberga todo: desde un espacioso probador hasta un área de almacenamiento, despensa y pequeña cocina, zona de circulación y un aseo. Todos y cada uno de los espacios han sido compartimentados a través de una estructura con un diseño orgánico creando la sensación de movimiento y fluidez deseada para el proyecto. Consiguiendo así una unidad heterogénea entre los diferentes ambientes.
Cada detalle ha sido cuidadosamente considerado para crear una experiencia única y placentera. El uso de materiales naturales y la cohesión entre los elementos dotan al espacio de un ambiente acogedor y funcional, donde el diseño se integra a la perfección con la actividad del negocio. El resultado es un escenario perfecto para inspirar y crear.
El banco central del negocio, los estantes empotrados, utilizados como expositores de producto, la mesa de trabajo de mármol verde, los percheros, realizados en metal dorado suspendidos del techo, y las alfombras, fueron diseñados exclusivamente para el atelier, complementando la armonía de la obra.
La paleta de colores elegida para el taller de la modista, integra la identidad visual de la marca y mantiene la coherencia del proyecto. Una paleta de tonos naturales suaves en la que el color piedra ofrece un telón de fondo junto al pavimento de madera, mientras detalles en mármol verde, cerámica de terracota rosada y metal dorado, dan las píncelas adecuadas para darle vida al local.
El techo fue creado a modo de bóveda de yeso, consiguiendo así dispersar la luz artificial de manera indirecta y simulando la suavidad de la luz natural a lo largo del día, lo cual se vuelve fundamental durante las últimas horas de la tarde y la noche. Además, los focos han sido instalados estratégicamente asegurando el máximo confort visual en el ambiente.
Fotografía de Marcos Fertonani
