Ubicado en el distrito de Gakuenmae, en la ciudad de Nara, el diseño de Fujiwaramuro Architects destaca por una espectacular cubierta que acompaña a la extrema y complicada morfología de la parcela
Según explica el equipo de arquitectos, el diseño de esta unifamiliar comenzó con una simple consulta de los clientes sobre si esta propiedad, que no se había vendido durante un largo período, podía o no utilizarse para construir una casa.
Entre las principales peticiones que los clientes hicieron al estudio, tres destacan como puntos relevantes en el diseño de la vivienda. En primer lugar, solicitaron que la cocina funcionase como el núcleo de la casa, ya que la esposa a menudo pasa gran parte del día en ella debido a su pasión culinaria. Además, también se pidió que la casa tuviese un ambiente al aire libre debido a que la familia es asidua a la práctica de trekking y camping. Y por último, estacionamiento para un automóvil, por simples razones logísticas y espaciales; Japón es un país de limitada superficie, en el que el aparcamiento es principalmente privado o de pago.
La creación de un espacio de estacionamiento planteó un problema debido a la brecha de elevación entre la propiedad y la carretera. En un principio, se consideró ampliar el área adyacente a la calzada para crear un espacio de estacionamiento y construir un muro de contención de hormigón alrededor de la porción elevada restante de la propiedad. Sin embargo, el alto coste llevó a los arquitectos a optar por la creación de una pendiente gradual que llega a la parte posterior de la propiedad y nivela suavemente el terreno adyacente. Esto resultó en una gran rampa que inspiró la imagen de una casa triangular delimitada por el muro de contención en el norte y con un gran techo cubriendo el espacio vital.
El proceso minucioso de diseño y construcción consiguió, a pesar de enfrentarse a varias condiciones difíciles, sacar el mejor rendimiento de la parcela con una edificación que disfruta de una conexión con el entorno exterior, mientras la estructura de madera, que sobresale de debajo de los aleros, protege la privacidad de los habitantes de la vista de los transeuntes.
La distribución y diseño interior de la vivienda destaca por su sencillez: muros blancos, pavimento en madera, y mobiliario mínimo.
Bajo los aleros donde el techo es bajo, se encuentra la entrada y una sala de estar a modo de genkan, áreas pavimentadas con hormigón donde se pueden usar zapatos. En el centro del edificio, donde el techo inclinado es más alto, se ubica la cocina, el comedor y una segunda sala de estar a cada lado, un espacio continuo de concepto abierto que magnificas las proporciones de cada uno de los ambientes, consiguiendo así una sensación de distensión para la vivienda.
En la misma planta encontramos, también, el dormitorio principal y el baño, mientras que la habitación de los niños está en la planta superior. Además, entre la casa y el muro de contención, se agregó una terraza, así como un jardín privado y un área para hacer proyectos de bricolaje.
Al crear distribución lineal de espacios, desde entrada en el lado suroeste hasta el comedor conectado a la cubierta y la luminosa sala de estar llena de luz solar del sur, Fujiwaramuro Architects logra diseñar una casa donde los residentes puede buscar el espacio que más le convenga a medida que cambian las estaciones y las horas del día, cada uno disfrutando del hogar a su manera.
Escrito por María José Sanz desde YOKOHAMA
Fotografías de Katsuya Taira