Tras un largo sendero en mitad de un frondoso bosque encontramos el proyecto Nasu Tepee, una vivienda con una peculiar geometría pensada para el disfrute de la familia y de la naturaleza, un lugar donde poder escapar de la caótica urbe japonesa
Fotografía de Koji Fuji - Nacasa & Partners Inc
La construcción ha sido diseñada por el prestigioso estudio de arquitectura Hiroshi Nakamura & NAP. Esta se encuentra en Nasu, prefectura de Tochigi (Japón), un conocido lugar de veraneo rodeado por un gran bosque de árboles mixtos. La principal petición del cliente era la de poder disfrutar los fines de semana de la vida en la naturaleza y de la agricultura orgánica, preservando la mayor parte de la vegetación circundante posible.
Para lograr dar respuesta a la noble petición de los propietarios de la vivienda, el equipo de diseño evitó la construcción a gran escala para así reducir en gran medida la tala; como resultado, se creó un tejido de habitaciones sobre diferentes superficies y terrenos, unidas mediante un cosido estructural.
Imagen de Hiroshi Nakamura & NAP
Dado que la parcela está ubicada en medio de densos bosques, el proyecto necesitaba de altos techos que permitiesen a la casa la entrada directa de luz solar. Sin embargo, esto provocaría que el espacio fuese demasiado grande, incrementando así el uso energético para su aclimatación y el consecuente choque contra la vegetación circundante.
Como respuesta a ello, el diseño eliminó el espacio innecesario. Se redujo la cubierta superior de forma diagonal para que el techo fuese bajando en función de la circulación interior de la vivienda, consiguiendo de esta manera una casa en forma de ‘tepee’ indio, con solo un tercio del volumen y una altura libre promedio de 2,6 metros.
Fotografía de Koji Fuji - Nacasa & Partners Inc
El techo más alto es de 8 metros y alcanza a conseguir luz natural, mientras que la geometría respeta el crecimiento de las ramas de los árboles que se extienden radialmente. La cubierta puntiaguda va acompañada de voladizos ligeramente por encima del suelo para evitar que entren insectos, humedad y nieve en la casa.
Fotografía de Koji Fuji - Nacasa & Partners Inc
Todas las ventanas disponen de doble acristalamiento para garantizar que los espacios altos sean herméticos y estén bien aislados. La instalación de una chimenea, suelo radiante y un sistema de aire acondicionado prometen una temperatura constante y agradable en su interior. Durante el verano, el aire cálido se acumula en la parte superior y escapa a través de la ventana lateral superior, mientras que en invierno, el aire caliente en la parte superior es aspirado y expulsado a nivel del suelo creando un circuito de climatización efectivo que reduce el consumo energético.
Fotografías de Koji Fuji - Nacasa & Partners Inc
En cuanto a sus interiores, basados en los pilares del minimalismo, la casa disfruta de comunicación y circulación abierta, a pesar de ello la privacidad de las habitaciones no se ve reducida en gran medida gracias a la geometría de los muros. Los espacios comunes se vuelven un punto de encuentro, y tal y como explican los responsables del diseño, se trata de una arquitectura que aspira a influir en los hábitos de las personas y a fortalecer la conexión y el vínculo de la familia.
Fotografías de Koji Fuji - Nacasa & Partners Inc y Hiroshi Nakamura & NAP
En cuanto a acabados, muros lisos blancos son enmarcados por pavimento, marcos de ventanas y puertas en madera, un toque sencillo y elegante que transmite la calidez y cercanía de la naturaleza que envuelve la edificación.
Escrito por María José Sanz desde YOKOHAMA
Fotografías de Koji Fuji - Nacasa & Partners Inc, Hiroshi Nakamura & NAP