Una intervención elemental de reciclaje y rehabilitación.
Planta del Proyecto
Bocetos a mano
Imagen de la zona
En el área rural de Mocha, Ecuador, los arquitectos de Al Borde han rehabilitado un antiguo establo en vivienda.
Imagen exterior antes de rehabilitación
En un mal estado, el establo cumplía con lo mínimo, una estructura que no se caía.
Imagen interior antes de rehabilitación
El bajo presupuesto y la urgencia de habitarlo eran parte vital del proyecto. Como en todas sus obras, Al Borde utilizó la vieja fórmula del que no tiene más remedio: trabajar con lo que hay a la mano.
La realización de las instalaciones mediante el método clásico, picar la pared para pasar las instalaciones eléctricas y de agua, colocar tuberías y sellar la pared, era imposible por el presupuesto, así que todo quedaría visto.
Vista interior de cubierta rehabilitada
En la zona de la cubierta, impermeabilizar todo y volver a entejar, no era posible, así que se optó por sustituir donde hubo teja ahora hay una lámina asfáltica que se apoya en la subestructura original.
Imagen zona de cocina-estar
En el interior se utilizó el mismo sistema de enfoque para rehabilitar. Hacer ventanas más grandes significa rehacer dinteles y desechar marcos y vidrios originales. También influyó el clima frío, la casa está ubicada a 3300 m sobre el nivel del mar.
La solución de la cubierta resuelve calor y luz, al agregar tragaluces. Para completar los límites de las habitaciones y los vanos principales de una manera económica y rápida se usaron tablas de madera maciza para no cargar más peso a las paredes originales.
Para el equipamiento, el cliente tenía piezas sanitarias y puertas que se re-utilizaron en su nueva casa.
Los arquitectos del equipo Al Borde explican que los materiales necesitan protegerse del uso y del tiempo. Así en un principio, se plantearon la formalización de cada material es lo que es, pero no había ni tiempo, ni dinero. Se opta por una intervención elemental de reciclaje y rehabilitación.
Dormitorio
El color que se escogió para regularizar el paramento, un color sucio, Al Borde hizo pruebas sobre las pareces como si fuesen suelo, para encontrar el color que camufle mejor el uso, hicieron un estudio de la cromática del polvo y de las manchas inevitables de humedad en zonas lluviosas. El resultado: color sucio.
La pintura se utilizó en los paramentos verticalesy algunas partes de la estructura. En el pavimento se debía tener otras características: además de sellar el material, debe resistir el uso que demanda su función.
La mejor opción calidad precio era baldosas de cemento, resuelve así todos los espacios de la casa, con una visión buena cuando está sucio y cuando está limpio.
En el exterior solo mantuvieron lo que había. Porque el polvo que se desprende de los materiales por el paso del tiempo o por el uso, era irrelevante en el exterior, según comentan los arquitectos.
Con este proyecto de rehabilitación obtuvieron en el año 2012 el Primer Premio Nacional, Categoría Rehabilitación y Reciclaje y 2do Premio Internacional, Categoría Rehabilitación y Reciclaje.
Imágenes: © Francisco Suarez, Karina Barragán, Al Borde