Restaurante Moonhouse de Ewert Leaf. Art Deco y arquitectura sensorialCon la esperanza de crear un espacio en el que ofrecer una experiencia memorable para los clientes, el estudio de arquitectura y diseño Ewert Leaf convierte el restaurante Moonhouse en un lugar para el disfrute de la cocina china inspirado en la década de los años 20
En Balaclava, un suburbio al suroeste de la ciudad de Melbourne, encontramos el restaurante Moonhouse. Un proyecto de interiorismo creado por el estudio de arquitectura y diseño Ewert Leaf, con el objetivo de conseguir un espacio centrado en las emocionantes sinergias entre el menú, las bebidas, el ambiente y el sonido, para ofrecer una experiencia sensorial memorable al comensal.
El restaurante Moonhouse forma parte de la empresa Commune Group, una compañía australiana que cuenta con una serie de restauradores experimentales de comida asiática.
La solución de diseño del equipo de arquitectos fue reflejar la personalidad y las aspiraciones de Commune Group. La icónica arquitectura Art Deco fue el estilo elegido debido a que es la plataforma perfecta para explorar soluciones de diseño creativo. Dado que la cocina del restaurante iba a ser china, el equipo de Ewert Leaf investigó el movimiento Art Deco de la década de 1920 en Shanghái, así como la arquitectura china moderna que, en última instancia, inspiró el diseño de lineas curvas que forman la envolvente de la cocina y las características del techo de todo el local.
El equipo de diseño apostó por la superposición de materiales únicos para crear un contraste entre la textura y el color, lo duro y lo blando. El vidrio martillado armoniza a la perfección con los azulejos texturizados de las paredes, mientras que las superficies horizontales fueron revestidas de vinilo y ónix. El uso frecuente de naranja dorado quemado, a lo largo y ancho del espacio, tomó inspiración del color del pato asado tradicional chino.
La zona de cocina es un centro de actividad, el corazón del restaurante, cuya presencia necesitaba ser vista y experimentada. Con la intención de conseguir una conexión entre el chef y el comensal, se crearon varios niveles de transparencia, revelando el movimiento y la acción de la cocina a través de vidrios texturizados de colores y recortes estratégicos, al mismo tiempo que genera intimidad para los comensales cercanos.
La estructura de metal curvo que envuelve la cocina es un guiño a la arquitectura Art Deco clásica, mientras que las persianas lo son a las calles de Hong Kong. Infinidad de detalles bien estudiados y seleccionados dan como resultado este extraordinario proyecto, tanto en el interior como con su iluminación exterior, y consiguen atrapar al cliente en la experiencia sensorial incluso antes de acceder al local.
Fotografía de Jack Love
