House with a Light Void es la respuesta de FujiwaraMuro Architects a la demanda de privacidad de los clientes de esta casa, situada en la prefectura japonesa de Hyogo, en una parcela rodeada de calles residenciales con tres fachadas exteriores, situada cerca de una vía muy transitada
La vivienda, de menos de 90 m2, se aísla del entorno gracias a una envolvente prácticamente opaca y neutra, de color blanco liso, en la que se abren tan sólo una puerta de acceso de madera en la fachada norte y un pequeño hueco de corte cuadrado situado en la fachada contigua.
A pesar de la opacidad de la envolvente, el interior se inunda de luz natural procedente de los tragaluces dispuestos en la cubierta, y la segunda envolvente de la planta superior, resuelta con vidrio, que ejerce de pozo que baña con luz cenital los espacios inferiores.
En la primera planta se disponen 5 volúmenes que se sitúan en las 4 esquinas y en el centro de la planta. Las esquinas albergan el dormitorio principal, al cual se accede a través de un aseo, dos dormitorios infantiles y un espacio de vestidor común.
La caja central se eleva respecto del plano del suelo para crear dos estancias, una semienterrada, a la cual se accede a través de un vidrio deslizante, y otra elevada, a la cual se accede por una pequeña escalerilla de madera. Ambas sirven para múltiples usos, conectadas visualmente mediante un suelo de vidrio que las comunica entre ellas y con el piso inmediatamente superior, donde se sitúa un solárium, que permite disfrutar de las vistas del cielo.
Los espacios creados entre las 5 cajas contienen el programa de día. En primer instancia, tras el acceso, se sitúa el zaguán, que comunica con el salón, a mano derecha, y con la cocina, a la izquierda, conectando ambos con el comedor, situado tras el volumen central.
En este recorrido el espacio se descomprime, disfrutando de una altura libre de 4,5 m.
La escalera que comunica con el nivel superior, con un peldañeado de madera de gran ligereza, discurre junto a la fachada opuesta a la de acceso.
Desemboca en un baño lineal, situado en el nivel superior, compartimentado en dos partes, situando la cabina de la bañera al otro extremo del corredor que las comunica.
Junto a la cabina de la bañera, el corredor comunica con una terraza acristalada, por donde se accede a un balcón exterior. La privacidad de este espacio queda garantizada por el muro opaco de la envolvente, que se eleva hasta la altura de una planta. Este muro se repite en el lado longitudinal, creando un paso que comunica con el otro extremo de la terraza, donde se abre el pequeño mirador cuadrado que ofrece vistas del barrio.
El resto de la piel interior se resuelve con vidrio, comunicando con la doble altura de los espacios de día situados en el nivel inferior, proporcionándoles luz y ventilación.
Del mismo modo, en las esquinas del segundo nivel se sitúan los tragaluces que iluminan los dormitorios de los niños y el vestidor.
Todas las superficies verticales interiores se cubren con revestimientos neutros, que combinan los acabados en yeso blanco con otras de microcemento.
En el caso de los pavimentos la protagonista es la madera, que aporta calidez a los espacios.
Imágenes de Katsuya Taira