Los arquitectos de Onze04 y Bau son los artífices de un nuevo complejo escolar Simone Veil, el primer equipamiento de un nuevo distrito residencial cercano al centro de Burdeos, que supone la renovación urbana de un antiguo distrito industrial en decadencia
El edificio divide el programa escolar en dos volúmenes, uno de un solo nivel y el otro de 2 niveles, que se muerden cerrando la manzana, creando un espacio de transición entre ambos, a modo de calle interior, donde se dispone la entrada principal, protegiendo así el espacio docente del ámbito público de la calle.
Ambos volúmenes rodean el patio central, que sirve de espacio de recreo y relación para los menores, hacia el cual vuelcan las aulas de la planta baja.
Asimismo, la cubierta del volumen de menor altura se aprovecha para disponer de un mayor número de espacios exteriores transitables. Se resuelve con un acabado de pavimento duro, que alberga incluso una pista deportiva, mientras que la cubierta del segundo nivel opta por una solución verde más ecológica y sostenible, no transitable en este caso.
La materialización del edificio apuesta por la sencillez y vinculación con el lugar, utilizando materiales y técnicas propias de la región, creando así un edificio emblemático para el nuevo distrito. Para ello, crea un zócalo de hormigón armado ejecutado in situ en el volumen principal del edificio, sobre el que descansa el nivel superior, en el que destaca una piel de celosía cerámica que otorga carácter al edificio.
La celosía presenta un perfil dentado en la parte inferior, respetando así el esquema compositivo de los huecos de ventana.
En el volumen saliente que crea la calle de acceso, la celosía cubre toda la altura del edificio, otorgando privacidad a los espacios, pasando en este caso por delante de los huecos, incluso en el caso de la puerta de acceso.
Las fachadas recayentes al patio interior se terminan con un acabado continuo en color blanco, apostando por la neutralidad, relegando la nota de color a la señalética del pavimento, donde destaca la utilización del amarillo.
Lo mismo sucede con los acabados interiores, que apuestan por los suelos cementosos y los paramentos blancos, donde destacan las piezas de mobiliario de madera clara con nuevas notas de amarillo.